¿Cómo influyen las redes sociales en la salud mental? En las últimas décadas las nuevas tecnologías e Internet han generado un cambio de paradigma en la forma en la que nos comunicamos e interactuamos con nuestro entorno. Asimismo, el uso que hacemos de las redes sociales se ha incrementado de manera significativa por lo que ya se estudia cómo pueden afectar las redes sociales a la salud mental.

El aumento del tiempo que dedicamos a su uso está relacionado a su vez con la sensación de un aislamiento cada vez mayor del mundo real. Un hecho que de no revertirse en algunas personas puede contribuir a desarrollar algún tipo de trastorno mental.

Por su parte, tanto el contenido publicado como el consumido por los usuarios es cada vez más influyente e impactante. Y es que muchas de estas publicaciones pueden reforzar el narcisismo, un nivel de vida para muchos inalcanzable o el consumo de malos hábitos entre otros. Un uso inadecuado de los contenidos que consumimos o la obsesión por el “like” de nuestras publicaciones pueden contribuir a una disminución de la autoestima; así como con síntomas depresivos o de ansiedad.

 

¿De qué manera influyen las redes sociales en la salud mental cuando existe una dependencia excesiva de ellas?

Cabe destacar que las redes sociales sirven en su mayor parte para el desarrollo de la creatividad, acortar distancias con los demás o, incluso, expresar sentimientos. Sin embargo, un uso excesivo y pérdida de control sobre ellas puede provocar el desarrollo de algunos trastornos mentales o la dificultad de desempeñar tareas y funciones de la vida cotidiana con normalidad. ¿Cómo influyen las redes sociales en la salud mental?

  • Depresión.
  • Obsesión y dependencia constante en el monitoreo de nuestras redes sociales.
  • Autoengaño.
  • Baja autoestima y obsesión por la imagen corporal.
  • Ansiedad cuando no se está conectado.
  • Trastornos del sueño.

Por desgracia existen consecuencias muy negativas ante un uso excesivo de las redes sociales. Y es que son varios los casos de suicidios entre influencers que han sido sobrepasados por la vida irreal que se han creado en sus perfiles. Por otra parte existe, a su vez, un alto grado de frustración entre aquellos que sólo siguen cuentas que ostentan vidas inalcanzables y que, en muchos casos, son creadas de forma engañosa con el fin de conseguir seguidores.

 

¿Cómo evitar la dependencia a las redes sociales y a sus consecuencias?

Existen técnicas para evitar caer en la dependencia a las nuevas tecnologías y redes sociales que afecten posteriormente a la salud mental:

  • Limitar el uso de horas de acceso a las redes sociales.
  • Escoger de forma adecuada a quiénes seguimos.
  • No compartir fotos comprometidas o información personal.
  • Llevar a cabo un análisis críticos de lo que nos muestran otros usuarios.
  • Desarrollar habilidades sociales que no dependan de las nuevas tecnologías.

Si por su parte, te sientes ansioso cuando no estás conectado, nunca te ves lo suficientemente bien en las fotos, te afecta el número de personas que le dan a “like” a tus publicaciones o te sientes frustrado y deprimido porque tu vida no se parece a la de los que sigues, como psicóloga experta en tratar adiciones a las nuevas tecnologías en Málaga, te recomiendo a acudir a un profesional de la salud mental.

Existen muchas herramientas y técnicas que, junto a una terapia personalizada para tratar la adicción a las redes sociales, te pueden ayudar a disminuir y a combatir los efectos de este mal uso como son la depresión, ansiedad, baja autoestima o aislamiento entre otros muchos.

Psicóloga Elizabeth Vazquez

Las razones por las que podemos necesitar la intervención de un profesional de la psicología pueden ser muy variadas; desde problemas con la pareja, con los hijos, con adicciones, la pérdida de un ser querido, falta de autoestima, enfermedades crónicas y todas aquellas situaciones que nos causen malestar y no podamos solucionar por nuestros propios medios. A través de mi orientación y guía trabajaremos juntos para aprender a controlar tu vida. El cambio es posible. ¡El primer paso es empezar!