¿Cuál ha sido el impacto psicológico del Covid-19 en las personas? ¿Qué es la coronafobia? ¿Por qué se ha incrementado el uso de la terapia con profesionales de la psicología a raíz de la pandemia? Miedo, incertidumbre, frustración y soledad son algunos de los sentimientos encontrados en un gran porcentaje de la población a raíz de la llegada de este virus.

En muchos casos y, sobre todo en pacientes con depresión crónica, esos sentimientos han agravado su enfermedad retrayéndose al interior de sus hogares y dejando las relaciones sociales de lado. Por otra parte, otro porcentaje de la población que no sufría de este tipo de patologías, ha comenzado a desarrollar otro tipo de enfermedad como es la fobia social o la que ya se ha denominado coronafobia.

 

¿Qué es la coronofobia?

La coronofobia es una palabra que se acuñó en 2020 y que se refiere al desorden psicológico causado por el impacto que ha tenido el Covid-19 en nuestras vidas. Esta fobia emergente se caracteriza por el miedo, angustia, depresión y ansiedad ante la posibilidad de contagiarse.

Cabe destacar que puede afectar a personas de riesgo. Entre ellas se encuentran aquellas que presentan comportamientos compulsivos, episodios de ansiedad o depresiones no tratadas. Sin embargo, también afecta ya a personas sanas. Y es que esa ansiedad excesiva a contraer el virus está relacionada con la preocupación excesiva, el estrés, síntomas de depresión, ansiedad y, en los casos más extremos, ideas suicidas.

 

¿Se puede tratar la coronafobia?

Por supuesto. Todo tipo de fobia se puede tratar con una terapia adaptada a cada persona en particular. Tratar las fobias, sea la que sea, es primordial para salir de ese círculo de sentimientos. Y es que, a raíz del aprendizaje de técnicas que modifiquen este tipo de comportamientos y les enseñen a gestionar sus emociones, se consigue que los pacientes se enfrenten a sus miedos y eliminen o disminuyan esa sensación de ansiedad provocada por la fobia.

Tras casi dos años de pandemia mundial, los psicólogos hemos comenzado a ver en nuestras consultas las secuelas psicológicas que ha dejado en la población este virus. El aislamiento social de varios meses, la continua falta de afecto físico para evitar el contagio o la imposibilidad de reunirse en fiestas señaladas, entre otros, ha hecho mella en muchas personas y, más aún, en mayores y quienes viven solas.

Por otra parte, y como último apunte, la sensación de incertidumbre ha generado en muchos casos el sentimiento de frustración. Y es que la inestabilidad política, financiera o la pérdida masiva de empleos han sido detonantes para que también los jóvenes con sueños y expectativas de futuro sientan esa falta de éxito y, por tanto, la frustración ante el porvenir que les espera. Es por ello, que las consultas también se han visto incrementadas por estos jóvenes que tratan de gestionar ese tipo de sentimientos.

Así pues, los psicólogos ayudamos a tratar, de la mano de terapias personalizadas, la coronafobia, los sentimientos de frustración de muchos jóvenes y todo aquel impacto psicológico que el Covid-19 ha dejado en muchos hogares.

Psicóloga Elizabeth Vazquez

Las razones por las que podemos necesitar la intervención de un profesional de la psicología pueden ser muy variadas; desde problemas con la pareja, con los hijos, con adicciones, la pérdida de un ser querido, falta de autoestima, enfermedades crónicas y todas aquellas situaciones que nos causen malestar y no podamos solucionar por nuestros propios medios. A través de mi orientación y guía trabajaremos juntos para aprender a controlar tu vida. El cambio es posible. ¡El primer paso es empezar!